En Avilés en los ochenta había un local de copas llamado Dulcinea decorado con enormes cuadros de Ana Juan y Javier de Juan, siempre soñé con robarlos :-)
El sitio tenía su miga, había sido en sus tiempos un prostíbulo y más tarde uno de los pocos lugares donde escuchar música "moderna" -inglesa, americana- durante la dictadura de Franco. Claro que yo sólo sé de eso por los mayores.
¡Auténticas maravillas!
ResponderEliminarEn Avilés en los ochenta había un local de copas llamado Dulcinea decorado con enormes cuadros de Ana Juan y Javier de Juan, siempre soñé con robarlos :-)
El sitio tenía su miga, había sido en sus tiempos un prostíbulo y más tarde uno de los pocos lugares donde escuchar música "moderna" -inglesa, americana- durante la dictadura de Franco. Claro que yo sólo sé de eso por los mayores.