Hoy.
No digo nada... pero lo cierto es que ni sé por dónde empezar... que me apetece todo mucho. (Por no hablar de lo que me he dejado en la tienda para otro día...)
viernes, 30 de noviembre de 2007
alguna compra
Hoy.
No digo nada... pero lo cierto es que ni sé por dónde empezar... que me apetece todo mucho. (Por no hablar de lo que me he dejado en la tienda para otro día...)
para pronto...
Ah, planes para los próximos meses... y un par de títulos que conviene no perder de vista, señores. Fun Home lo leí y me pareció cojonudo, si me permiten el palabro. Y en Liniers tengo fe ciega...
interviú
Una entrevista con Javi Rodríguez en 13 millones de naves, espacio de visita obligada.
(La ilustración la cuelga el amigo Javi en su página. Hay más, pero esta ha sido amor a primera vista: ¡dirigibles! Por así decir...)
last contact
Un relato de Stephen Baxter, breve y ajustado. Se avecina el fin del universo, tal cual: un asunto enredado de energía oscura y la realidad que se va disgregando. Y, en esos últimos meses, mientras la Humanidad aguarda que todo acabe, no hay día que no se reciban mensajes, señales de otras civilizaciones allá lejos que parecen lanzar una despedida postrera antes de desaparecer.
Una idea que podría dar para tanto, o para tan poco. Una idea que algunos resolverían con fuegos de artificio, con grandes alardes técnicos. Una idea que el señor Baxter aborda desde la conversación de una madre y una hija, desde un costumbrismo cómodo y emotivo.
En el cuento, mientras no dejan de llegar mensajes de civilizaciones que mueren en la lejanía de un cosmos que desaparece, la vida sigue.
Una idea que podría dar para tanto, o para tan poco. Una idea que algunos resolverían con fuegos de artificio, con grandes alardes técnicos. Una idea que el señor Baxter aborda desde la conversación de una madre y una hija, desde un costumbrismo cómodo y emotivo.
En el cuento, mientras no dejan de llegar mensajes de civilizaciones que mueren en la lejanía de un cosmos que desaparece, la vida sigue.
jueves, 29 de noviembre de 2007
hoy es jueves
Y he salido a comprar.
Y he soñado con un perro con un ataque de histeria. (Quizá porque anoche estuve mirando un poco por encima el 59 Segundos en la tele pública y un Miguel Ángel Rodríguez exaltado dijo cosas de verdad graves y estúpidas en un tono más que histérico, también: le faltó la espuma en los belfos.)
Y ando a la carrera, que en cinco minutos tengo que salir para ir al trabajo (donde, por cierto, las cosas van de mal en peor y no sé si lo único que queda no será disimular, ya saben, mirar para otro lado y limitarse a cobrar a final de mes y ahí me las den todas... pero es tan difícil, cuando llevas tantos años integrado en un sitio y hasta -terrible pecado que la nueva Dirección castiga con dureza- le tienes cariño y te importa).
Y al solecito se está bien, no se vayan a creer.
(Y conviene hacerse con reservas de turrón de chocolate, por cierto, que luego desaparece del mercado y se pasa uno la Navidad con síndrome de abstinencia...)
Y he soñado con un perro con un ataque de histeria. (Quizá porque anoche estuve mirando un poco por encima el 59 Segundos en la tele pública y un Miguel Ángel Rodríguez exaltado dijo cosas de verdad graves y estúpidas en un tono más que histérico, también: le faltó la espuma en los belfos.)
Y ando a la carrera, que en cinco minutos tengo que salir para ir al trabajo (donde, por cierto, las cosas van de mal en peor y no sé si lo único que queda no será disimular, ya saben, mirar para otro lado y limitarse a cobrar a final de mes y ahí me las den todas... pero es tan difícil, cuando llevas tantos años integrado en un sitio y hasta -terrible pecado que la nueva Dirección castiga con dureza- le tienes cariño y te importa).
Y al solecito se está bien, no se vayan a creer.
(Y conviene hacerse con reservas de turrón de chocolate, por cierto, que luego desaparece del mercado y se pasa uno la Navidad con síndrome de abstinencia...)
madrid y tebeos
miércoles, 28 de noviembre de 2007
aniversarios libreros
En Madrid Cómics eché los dientes, por así decir. Incluso trabajé como dependiente durante unos meses, hace muchos, muchos años.
Arte 9 editó Stock, boletín en el que me inicié con un artículo sobre la escuela madrizleña. Después, al poco, Lorenzo Díaz me reclutó para su Urich (boletín editado, sí, por Madrid Cómics...)
El tiempo pasa y aquí seguimos todos, de una u otra manera, más cerca o más lejos, pero siempre dentro.
(La ilustración para Arte9, por cierto, es de Fermín Solís.)
Arte 9 editó Stock, boletín en el que me inicié con un artículo sobre la escuela madrizleña. Después, al poco, Lorenzo Díaz me reclutó para su Urich (boletín editado, sí, por Madrid Cómics...)
El tiempo pasa y aquí seguimos todos, de una u otra manera, más cerca o más lejos, pero siempre dentro.
(La ilustración para Arte9, por cierto, es de Fermín Solís.)
martes, 27 de noviembre de 2007
calentando motores
Por un lado, aquí se puede leer el listado de premiados en el inminente Expocómic.
Por otro lado, aquí abajo está el calendario de firmas que plantean desde Dibbuks.
Por otro lado, aquí abajo está el calendario de firmas que plantean desde Dibbuks.
lunes, 26 de noviembre de 2007
huellas
O ventanas, quizá. No sé.
Parte del encanto de rebuscar entre libros viejos está en hallar tesoros entre sus páginas: un par de sellos portugueses, recordatorios de primera comunión, postales ajadas, fotografías en blanco y negro, un trozo de papel amarillo con una dirección garabateada, tarjetas de visita... No debe plantearse como una búsqueda metódica, hay que dejar que sea el azar quien guíe la mano y la vista; hojear los libros que a uno llaman la atención, sopesar la posibilidad de llevarlos a casa. Y únicamente entonces, cuando la duda está ahí, tener en cuenta si hay perlas de papel entre sus páginas. (No siempre el libro abandona su sitio, pero a veces sí el hallazgo viaja de vuelta a casa en el bolsillo, un secreto tesoro.)
Viene al caso, por cierto, de que tengo en casa una vieja edición de A la deriva en el Soho, una novelita de Colin Wilson. En primera edición (1964) de Luis de Caralt. Y que dentro había, hay todavía, una tarjeta del Lambert Arms, un hotelito en Oxfordshire, con sus tarifas por noche y su menú.
Buenos días, que hace sol y habría que aprovecharlo un poquito.
Parte del encanto de rebuscar entre libros viejos está en hallar tesoros entre sus páginas: un par de sellos portugueses, recordatorios de primera comunión, postales ajadas, fotografías en blanco y negro, un trozo de papel amarillo con una dirección garabateada, tarjetas de visita... No debe plantearse como una búsqueda metódica, hay que dejar que sea el azar quien guíe la mano y la vista; hojear los libros que a uno llaman la atención, sopesar la posibilidad de llevarlos a casa. Y únicamente entonces, cuando la duda está ahí, tener en cuenta si hay perlas de papel entre sus páginas. (No siempre el libro abandona su sitio, pero a veces sí el hallazgo viaja de vuelta a casa en el bolsillo, un secreto tesoro.)
Viene al caso, por cierto, de que tengo en casa una vieja edición de A la deriva en el Soho, una novelita de Colin Wilson. En primera edición (1964) de Luis de Caralt. Y que dentro había, hay todavía, una tarjeta del Lambert Arms, un hotelito en Oxfordshire, con sus tarifas por noche y su menú.
Buenos días, que hace sol y habría que aprovecharlo un poquito.
domingo, 25 de noviembre de 2007
próximamente... o antes
Me lo cuentan por teléfono. Mañana: Leonard Starr. En casa, un par de tomos. (Y también le tengo unas ganas considerables. Que, al final, de lo que se trata es de leer, y de disfrutar de quien sabe contar historias...)
(más arrugas...)
próximamente...
Le tengo ganas al Arrugas de Paco Roca. Me dio buena espina desde un principio, y hay dos reseñas de gente en cuyo criterio confío (acá y acá) que me abren más el apetito, si cabe.
Y tengo también ganas de poder leer la nueva entrega de Diarios de festival, de Ángel de la Calle, que está, parece, a punto de caramelo.
Por lo demás, la tarde transcurre despacito y con buena letra. Ha habido visita en casa y en un ratito tengo que poner una lavadora, ya se harán una idea... (En la calle, por cierto, hace un frío que pela.)
bizarre love triangle
La acera de sol, que cada vez dura menos tiempo caldeada. Es la acera de mi ventana, y el sol está ya a punto de esconderse detrás del bloque de enfrente.
Y suenan New Order, que son muy de domingo por la mañana, me parece a mí.
Y me gusta echar agua en el alféizar de cada ventana (que hacía falta; con la obra del patio y eso, está todo que da un poco de asco), el ruido del derramarse, el espejeo del sol, el olor a húmedo repentino.
Y abrir la olla, ver cómo ha quedado el guiso, cortar un poco de chorizo para rematar con una cocción lenta de media horita, a lo mejor. Poner a enfriar (un poquito, veinte minutos, lo justo) una botella de vino tinto.
Eso: domingo.
Y suenan New Order, que son muy de domingo por la mañana, me parece a mí.
Y me gusta echar agua en el alféizar de cada ventana (que hacía falta; con la obra del patio y eso, está todo que da un poco de asco), el ruido del derramarse, el espejeo del sol, el olor a húmedo repentino.
Y abrir la olla, ver cómo ha quedado el guiso, cortar un poco de chorizo para rematar con una cocción lenta de media horita, a lo mejor. Poner a enfriar (un poquito, veinte minutos, lo justo) una botella de vino tinto.
Eso: domingo.
sábado, 24 de noviembre de 2007
viernes, 23 de noviembre de 2007
Arrugas en los museos...
El álbum de Paco Roca (Arrugas, editado por Astiberri) se presenta mañana en La Central, la librería del Reina Sofía. A las 19'30 y a cargo de Eduardo G. Sánchez...
(Habrá otra presentación en Valencia, el 3 de diciembre. Pinchen la imagen y lean todos los datos...)
cómo ser Gallardo (aquí)
El jueves 29 se inaugura (a eso de las 19'00) una exposición del grandísimo Gallardo. Aquí, en Madriz. En la Galería Pelayo 47. Que será una de las exposiciones del año, seguro...
miércoles, 21 de noviembre de 2007
adiós, don F
Ninette y un señor de Murcia, El extraño viaje, La venganza de don Mendo, El viaje a ninguna parte... Y El pícaro, para la televisión, ¿se acuerdan?
Joder...
Joder...
dos lavadoras, dos
Que se va la tarde ya.
Aquí, un par de coladas y un paseo por la red en busca de cositas chulas que colgar aquí uno de estos días. Y calefacción, que el día está gélido.
Y ahora tengo que salir a tirar la basura, a llevar unos cartones y unos papeles al contenedor.
Y debo decir que he añadido Weeds (teleserie sorprendente con Elizabeth Perkins y Mary-Louise Parker, nada menos) a mi dieta televisual, con gran alborozo y no poco aprovechamiento.
Y eso...
Aquí, un par de coladas y un paseo por la red en busca de cositas chulas que colgar aquí uno de estos días. Y calefacción, que el día está gélido.
Y ahora tengo que salir a tirar la basura, a llevar unos cartones y unos papeles al contenedor.
Y debo decir que he añadido Weeds (teleserie sorprendente con Elizabeth Perkins y Mary-Louise Parker, nada menos) a mi dieta televisual, con gran alborozo y no poco aprovechamiento.
Y eso...
cita de jueves
Mañana, en concreto. A eso de las 21'30 y en Crono (Alberto Alcocer 7, en Madriz).
Concierto íntimo de Deshora, aventura personal de Sergio Pérez.
Presentado por Bruto Pomeroy, prohombre.
Concierto íntimo de Deshora, aventura personal de Sergio Pérez.
Presentado por Bruto Pomeroy, prohombre.
cambios en Love&Rockets
Ajá. Aquí lo pueden leer. Y vienen a decir que la cabecera se transforma en una suerte de antología periódica que recoja un centenar de nuevas páginas en cada entrega, repartidas entre los dos Hernández (con algún escarceo ocasional del tercero en discordia, Mario).
El reinado de la novela gráfica afecta a todos, ya lo ven. (Y los autores están, según ellos mismos dicen, encantados con el cambio: les permite tener más espacio para contar las cosas sin preocuparse de que la fragmentación en entregas eche para atrás a un público que está cada vez más por la labor de lecturas con cuerpo y largo recorrido...)
Por lo demás, a mí no me van a quedar uñas que morderme mientras espero a la primera entrega del nuevo formato, prevista para el verano próximo...
El reinado de la novela gráfica afecta a todos, ya lo ven. (Y los autores están, según ellos mismos dicen, encantados con el cambio: les permite tener más espacio para contar las cosas sin preocuparse de que la fragmentación en entregas eche para atrás a un público que está cada vez más por la labor de lecturas con cuerpo y largo recorrido...)
Por lo demás, a mí no me van a quedar uñas que morderme mientras espero a la primera entrega del nuevo formato, prevista para el verano próximo...
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