Sólo para los fans de Las chicas Gilmore, eso sí.
Aquí pueden leer una reseña de la nueva temporada que se emite en los EEUU, sin sus creadores al mando ya. Y, según se puede leer, la cosa entra en caída libre sin los Palladino. Caída libre hacia lo banal y lo convencional, terrenos que nunca transitó la serie.
Luto, por tanto.
Aquí, van poniéndose a la venta a una velocidad casi vertiginosa las diferentes temporadas: la quinta será la próxima, muy pronto.
7 comentarios:
Vaya, me encanta esta serie, pero bueno, 5 temporadas son muchas para mantener una historia, de momento me estoy deleitando con la segunda temporada, seguiré hasta que vea que la cosa decae.
Me gusta tu blog, no leo mucho cómic, pero de vez en cuando me gusta hojear algo, y tus recomendaciones son interesantes a la hora de buscar la próxima lectura, aunque la mayoría por falta de tiempo tenga que limitarme a archivarlas.
Tranquila, si no he contado mal el bajón se produce a la altura de la séptima.
Gracias por los piropos... y bienvenida. :)
Supongo que el año que viene me pondré con la serie (sí, así es, no la he visto todavía... ¡tantas cosas y tan poco tiempo!)
Sinceramente, y sin querer ofender a nadie. No se que le veis a esa serie, es lo mas prefabricado que hay en la television con diferencia. Todas las situaciones estan edulcoradas hasta el exceso, produciendo caries en el espectador con solo verlas. Los dialogos son impensables, demasiado literarios para que funcionen como algo hablado en una serie, las relaciones que muestran en cada capitulo son arquetipicas hasta la exasperacion, da la sensacion de que los creadores, guionistas o lo que sean buscan teledirigir un mensaje bucolico y preciosista de un pueblo americano de ambiente nostalgico y de ensueño, que tengo la sensacion de que no existe, por mucho que nos dediquemos a patearnos toda la geografia americana. Es lo que yo llamo realismo azucarado: actuaciones (mas bien sobreactuaciones) y dialogos exagerados y desproporcionados, demasiado teatrales: me imagino al director pensando cada escena que nuevo elemento barroco puede meter, que guiño pueden hacer los actores para logar la dulcificacion mas abosoluta y engañosa.
La verdad es que no la soporto, para que os voy a mentir. Lo malo es que mi chica cuando puede la ve. Menos mal que eso ocurre pocas veces.
Saludos
Bueno... como prefabricado, o artificioso, ya con Perdidos, por un poner, me vale. Y también la disfruto.
Por supuesto que no es realista. No creo que pretenda serlo. Hay toda una tradición de este tipo de cosa en los USA, creo: lo del pueblito bucólico y surrealista. Ahí está Doctor en Alaska, por un poner.
En cuanto a diálogos literarios y poco creíbles... creo que es premeditado y, para mí, muy disfrutable.
Lo del subidón de azúcar... precisamente es de eso de lo que acusan en la reseña que enlazo a la nueva temporada. No, no creo que lo que aquí hemos visto esté edulcorado. Es una cuestión de perspectivas y percepciones, claro...
Pero vamos, que para gustos colores, dicen. Y no ofende usted, jesúsc, no faltaba más. Opiniones, opiniones...
Ah pues no habia leido la reseña esa. Bueno, tampoco voy a leerla, la verdad :-)
En cuanto a lo de esa tradicion, es cierto que esa tendencia es la que seguia Doctor en Alaska, aunque en esta serie era mas llevadera la sensacion de dulzor. Supongo que buscando las raices de esa tradicion llegariamos al optimismo de Frank Capra y ese tipo de peliculas hiperoptimistas donde la "alegria por vivir" y una vision positiva de la vida es lo que manda. No se... seria cuestion de bucear un poco mas en el tema al que le apetezca y le guste, pero supongo que sera algo asi.
Saludos
En mi vida he visto algo más endulzado que "Sonrisas y lágrimas" y es un clásico o algo más esteriotipado y sobreactuado que "Mentiras arriesgadas" y fue el gran éxito cinematográfico de su año...
Me encanta las chicas Gilmore. Los diálogos absurdos madre-hija son del tipo que me gusta mantener con mis amigos, en que no se dice nada pero se juega mucho con la optra persona. Cuando lo importante no es el tiempo sino el placer de la compañía. Cuando le miras como diciendo: "mira, eres un pesado, pero te sigo el juego porque me apetece y porque eres el hermano de mi chica". Igual de absurdo que comer chicles con azucar, perder una noche jugando a las cartas o escribir tus ideas en un blog... Cosas que no cambiaran el sentido de giro del mundo, pero son las que le dan sentido al mismo.
Y por eso, cuando lo ponían y tenía tiempo, las veía... Que las han quitado: pues a fastidiarse, aunque tampoco lloraré.
Un saludo señor Naranjo y gracias por lo de antes.
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