Por empezar, empezaría por algunos libros que me han sorprendido (para bien, claro). Por ejemplo, la primera entrega de Curiosity Shop, de Montse Martín y Teresa Valero, un álbum a la usanza clásica, fresquito y sabroso, lleno de influencias bien asimiladas y que se lee del tirón y con una sonrisa. O, por ejemplo, Speak Low, retorno de Montesol al medio, un cambio radical de registro y una historia amarga que no sé si no se hubiera beneficiado de una apuesta gráfica menos expresionista. Leí con gusto Comedia sentimental pornográfica, de Jimmy Beaulieu, que me recordó un poco a algunas películas de, por ejemplo, Denys Arcand, y me ha gustado más de lo que esperaba el Barcazza de Cattani: una lectura sensual y veraniega que viene a demostrar hasta qué punto menos puede ser más.
He disfrutado también mucho (y con retraso, ya sé...) con la propuesta poética de Sergio García y Lola Moral en Odi's blog, y me han sorprendido otra vez, y mucho, Arthur de Pins y sus cangrejos.
Además, la nueva etapa de Daredevil (con Waid en los guiones y Paolo Rivera y Marcos Martín en los lápices) me ha refrescado bastante estos últimos días, y tiene su gracia que uno esté a estas alturas intrigado otra vez por este tipo de productos (David Aja o Emma Ríos o David Lafuente tienen también algo de culpa).
Y en esas estamos. Todavía me quedan cosas en el tintero, y todavía quedan cosas por leer en los montones de primera línea, así que les iré contando conforme vaya poniéndome al día.
1 comentario:
A mi me llama el Curiosity Shop, me llama mucho y mucho más tras ver la expo de originales en el Escoge.
...Y Martín, Aja, Ríos, Lafuente... menudos portentos, han conseguido devolverme el interés por un género que ya me aburre bastante, así que bravo por ellos... Y esperemos que en breve se les una Pulido con algo medianamente largo e interesante.
Un saludo.
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