Miro, incrédulo e hipnotizado, la cosa nueva de Cuatro: tres familias de perfectos imbéciles (que no se hacen ustedes una idea, ¿eh?) viajan a lejanos lugares para integrarse, durante tres semanas, en otras tantas tribus más o menos salvajes, ustedes me entienden.
Y yo querría haber encontrado una ilustración en la que un puñado de caníbales de los de siempre bailara en torno a una marmita llena de misioneros... pero no me ha dado tiempo.
En fin...
Y yo querría haber encontrado una ilustración en la que un puñado de caníbales de los de siempre bailara en torno a una marmita llena de misioneros... pero no me ha dado tiempo.
En fin...
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