sábado, 5 de septiembre de 2009

breviario del sábado por delante


Parece que amaneció ligero el día, fresquito en las esquinas.

Ayer la tarde fue acelerada, pero no acabó mal. Me despedí de SuperE, que entra en el quirófano el lunes próximo: cosa de ligamentos y meniscos, no sé, pero con ella no puede ni la kriptonita, seguro que va todo bien. Y me despedí de G, que se marchaba a una fiesta medieval en su Ávila (no me la imagino comiendo jabalí asado a dos manos, la verdad...). (Por cierto, y hablando de despedidas... R se marcha uno de estos días a India con su madre: buen viaje a las exploradoras.)

Esta tarde, fin de fiesta. Después, dos semanas largas para descansar en casa, a ver si puede ser que ponga orden de una vez en la trastienda y empiece a activar los frentes abandonados...

Por lo demás, bien. O algo. Aquí, leyendo Comanche y a la Gopegui...

1 comentario:

superE!!!!! dijo...

:)
:)