He dormido poco y mal, como los últimos días. Ando más bien de bajón y cansado, y el día libre se me ha ido sin darme ni cuenta: hacer compra, hacer unos deberes, hacer la colada, hacer... ¿nada? En fin...
Aquí al lado se ha citado esta tarde un buen montón de chavales. Suena ahora como una música coreada por mucha gente... Ni pizca de glamour ni de misterio, no se vayan a pensar: nada de flequillos cortados con tiralíneas, nada de medias rotas, nada de rimmel generoso... Un desperdicio de muchachada.
Ahora toca regar un poco el jardín artificial, que mañana madrugo y no me va a dar tiempo. Parece que ahí afuera se mueve el aire...
No hay comentarios:
Publicar un comentario