Mientras el sol se hace con la mañana y yo me quedo en casa hasta dentro de un buen rato, que la semana larga se ha acortado de repente, les dejo con los chiquillos sónicos... y una joya.
el clip da una ligera idea del impacto live de los sónicos. Cuando se ponen farrucos son como mediums de un sonido huracanado. Que viene de otra parte, que los posée. Moore frota su guitarra contra todo lo que se le pone por delante, mientras Kim ataca los amplis o Lee azota el mástil con una baqueta. Puedn salir las guitarras por lo saires, navegar sobre las cabezas de la primera fila, ser espadas en un duelo físiso, el colchón sobre el que se arroje Moore, un instrumento de percusión azotado en remolino... Im prezionantes en directo, más que en disco, si tal cosa puede ser
Sí, señor (punch). Cualquiera que haya estado en un concierto de estas fieras tiene, por fuerza, que recordar la sensación; no sólo el sonido, toda la sensación, es algo físico que va más allá de lo oído. Cerré los ojos y era como flotar en un mar de ruido (y juro que ni había fumado ni bebido como para descontrolar). Hasta ese momento dudaba de que fuera posible repetir en directo, sin efectos de estudio, un tema como este Diamond Sea. De todos los conciertos que he ido en mi vida, sólo se les acerca, a ratos, el Neil Young más desatado, con Crazy Horse, claro. (Por cierto, hay una cosilla, auténtica rareza de coleccionistas, llamada Arc, hecha más o menos a medias entre Young y Sonic Youth, que es una de las mayores barbaridades nunca grabadas)
3 comentarios:
el clip da una ligera idea del impacto live de los sónicos. Cuando se ponen farrucos son como mediums de un sonido huracanado. Que viene de otra parte, que los posée. Moore frota su guitarra contra todo lo que se le pone por delante, mientras Kim ataca los amplis o Lee azota el mástil con una baqueta. Puedn salir las guitarras por lo saires, navegar sobre las cabezas de la primera fila, ser espadas en un duelo físiso, el colchón sobre el que se arroje Moore, un instrumento de percusión azotado en remolino...
Im prezionantes en directo, más que en disco, si tal cosa puede ser
joyita el diamond sea, y gordos gordos en directo
Sí, señor (punch). Cualquiera que haya estado en un concierto de estas fieras tiene, por fuerza, que recordar la sensación; no sólo el sonido, toda la sensación, es algo físico que va más allá de lo oído. Cerré los ojos y era como flotar en un mar de ruido (y juro que ni había fumado ni bebido como para descontrolar). Hasta ese momento dudaba de que fuera posible repetir en directo, sin efectos de estudio, un tema como este Diamond Sea. De todos los conciertos que he ido en mi vida, sólo se les acerca, a ratos, el Neil Young más desatado, con Crazy Horse, claro. (Por cierto, hay una cosilla, auténtica rareza de coleccionistas, llamada Arc, hecha más o menos a medias entre Young y Sonic Youth, que es una de las mayores barbaridades nunca grabadas)
Agustín Oliver.
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