detrás de la ventana se mueven las sombras en ráfagas heladas, la luz porosa de una farola
alguien tararea una canción vieja con voz rota, de grava, de tierra húmeda
al entrar en la cama, el calor de un cuerpo cercano, dormido: una respiración lenta, el olor
el sabor de la sangre en la boca
el crujido de los radiadores: se enfrían despacio
1 comentario:
Ande, mire; "En Tránsito", como el disco de Serrat que me trajo Santa Claus el otro día.
Y pase un poco más los bistecs por la parrilla, hombre, que eso de irse a la cama con el sabor de la sangre en la boca debe ser de lo más desagradable y de lo menos sano.
Un saludo.
Publicar un comentario