Además del hielo traidor, otro peligro acecha hoy al viandante: las cagadas de perro ocultas bajo el blanco engañoso de la nieve. La ciudad es un enigma, amigos; y una jungla.
1 comentario:
Anónimo
dijo...
Ay el hielo que miedo me da!! Voy cual abuelita (sin bastón) temiendo por mi rodilla a cada paso... pero en el fondo me gusta el peligro!!!
1 comentario:
Ay el hielo que miedo me da!! Voy cual abuelita (sin bastón) temiendo por mi rodilla a cada paso... pero en el fondo me gusta el peligro!!!
je, je, je.
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