domingo... y gris

Eso, que hemos amanecido otra vez invernales.

A vuelapluma:

Primero, que estuve viendo anoche El tigre de Esnapur, de Fritz Lang. Extraña sensación, escuchar a unos hindúes de cartón piedra hablar un alemán esculpido en granito. Además, recordaba de mi infancia a una Debra Paget más fibrosa... pero está toda la emoción y el espíritu de la aventura por entregas, todos los tópicos, todo el brío de lo pulp. En una edición primorosa de la FNAC, que incluye también su continuación: La tumba india, que será convenientemente visionada (y disfrutada) en breve.

Segundo, que vi también hace un par de días Déjà Vu, la cosa de Tony Scott, un argumento sencillote de paradoja temporal desarrollado con solvencia y una espectacular puesta, como de costumbre. Mucho menos macarra que Domino. (Igual por eso la disfruté menos...)

Tercero, que estuve leyendo una entrevista editada por Airwave Publishing, un librito que, bajo el título de Alan Moore's Exit Interview, recoge una larga conversación mantenida por Bill Baker, en mayo de 2006, con un Moore bastante mosqueado con Hollywood, muy cabreado con DC en particular y con la industria norteamericana en general (llega a proponer que la solución para sanear el panorama es pegarle fuego y empezar de cero...) y muy ilusionado con Lost girls, con la continuación de La liga de los extraordinarios caballeros y con la novela en la que está ahora trabajando, Jerusalem, en la que vuelve a centrarse en su entorno inmediato: Northamptom.

Cuarto, que Jaime Martín ha abierto blog. Echen un ojo, si eso...

Quinto, que casi parece que vaya a salir el sol... pero no hagan mucho caso, será cosa de minutos. Todavía tiene que llover más.