miércoles, 20 de agosto de 2008

mister Briggs


Leí de una sentada Gentleman Jim, de Raymond Briggs. Es un librito editado con gusto, breve y emotivo. Un libro protagonizado por los Bloggs, la pareja que después nos hará reír y llorar en Cuando el viento sopla. Un libro que habla de sueños y de esperanzas, y de confianza, y de convivencia. Una fábula contemporánea y británica (pero muy británica: es quizá una de sus virtudes más obvias).

Un libro de 1980 que demuestra un conocimiento del medio asombroso, que se resuelve en una narración fluída que invita (empuja, casi diría) a la lectura, sin formalismos forzados ni soluciones pirotécnicas.

(Por supuesto, vuelvo a lamentar no tener a mano el otro, Cuando el viento sopla, que se editó en 1982 y que aquí publicó Debate, si no recuerdo mal, con traducción mediática de Rosa Montero, cuyo nombre figuraba en la cubierta como contraseña de respetabilidad no fuera a ser que los viejitos dibujados y coloreados y hablando en globitos echaran para atrás a los progres. No sé cuándo ni cómo, pero lo extravié. Confío en que alguien lo reedite pronto. En inglés, mejor. Mientras tanto, les dejo aquí abajo enlaces a la película, una adaptación modélica. Aprovechen mientras funcionan...)










Y aquí, la parte 4, la parte 5, la parte 6, la parte 7, y la parte 8. (Tengan cuidado, se llora mucho con esta película...)




(La edición de Gentleman Jim, por cierto, es de Drawn & Quarterly, tiene prólogo de Seth en el que señala a Briggs como uno de los pioneros de la novela gráfica y tiene un defecto: el tamaño; demasiado pequeño. Por lo demás... búsquenlo y disfruten.)

7 comentarios:

Octavio B. (señor punch) dijo...

yo de Briggs tengo su Papá Noel, desde niño y aún a la vista en la librería, que todas las navidades lo saco para leerlo (ahora con alguna sobrina por pretexto, pero lo leo... es un ritual).
Una pequeña cosa bonita. en castellano ¿qué más hay de él?

Anónimo dijo...

Yo tengo: El General Extranjero de Hojalata y la Vieja Dama de Hierro, en edición de 1985 de Debate (traducción de Montero, again). En origen: The Tin-Pot Foreign General and the Old Iron Woman (1984, Hamish Hamilton).

Es un relato ilustrado (magnificamente), que presenta una parábola del conflicto de las Malvinas.

-J. Edén

Álvaro Pons dijo...

Es una preciosidad de libro. Yo ya me lo he leído un par de veces en apenas unas semanas. Delicioso. Y tan bueno como todo lo que hace este hombre, comenzando por su magistral Cuando el viento sopla, que debería ser lectura obligatoria para muchos.

Anónimo dijo...

Amigos, me gustaría lanzar una pregunta que muchas veces me hago:
¿CÓMO ES POSIBLE LA EDICIÓN DE TANTA BASURA POR TODOS LADOS CON LA DE OBRAS MAESTRAS (AQUÍ LA OBRA DE BRIGGS VIENE A CUENTO, ES SUBLIME) QUE HAY SIN EDITAR? ¿QUÉ PASA? ¿ES ALGO QUE SÓLO PIENSO YO QUE TENGO MUY MAL GUSTO O ALGO QUE PIENSA MUCHA GENTE? No hablo de la edición de cosas raras, creo que Gasoline Alley no es algo raro, Philemon de Fred (con todo lo difícil que será traducirlo y tal, pero, amigos, el ULISES de Joyce está traducido), Polly and her pals, Terry and the Pirates (no considero que haya sido editado aquí aún tras ESO que hace poco han vendido y tras AQUELLO -más cuidado, eso sí- incompleto que vendieron),...

fcnaranjo dijo...

Que yo sepa son esos tres títulos los únicos que hay en castellano (y ahora encontrarlos, por cierto, es tarea de titanes).

(Y sí, amigo anónimo: es algo que muchos pensamos.)

Álvaro Pons dijo...

Te puedo asegurar que la traducción del Philemon de Fred no es nada compleja...
Y que es una obra maestra como pocas, uno de mis tebeos preferidos. :)

Octavio B. (señor punch) dijo...

anónimo, al decir que Terry "no considero que haya sido editado aquí aún tras ESO" creo que das en el clavo. Yo, por mal editada, es una obra que leí sólo parcialmente, pues me ofendía intelectualmente, y desde luego me niego a comprarla. es como si me pasan a ver la Siztina y está recoloreada y con los peinados cambiados según la moda del siglo XXI
Creo que estamos hablando de una de las obras de arte destacables ya no en los cómics,si no en el arte del siglo XX, un cénit de la historieta, arte que no se entiende sin Caniff, y además un reflejo de una sociedad y su modo de entender la vida en una época determinada. Como el Partenón, vamos :)
Podemos decir lo mismo de otro puñado de ejemplos, y el caso es que creo que de editarse se debe hacer desde el respeto a la obra, no desde el mercado. Terry es, como Gasoline Alley y otros ejemplos claros, una exquisitez que degustarán los entendidos, no las masas (guste o no, bajémonos del guindo). Y el entendido no quiere un bodrio, pagará gustoso el doble por algo óptimo. Porque ¿de verdad esas ediciones "populares" aunque malas de narices venden como para justificar el despropósito en su calidad como objeto?