lunes, 2 de marzo de 2009

contraindicaciones

Después de ver Camino, la película de Javier Fesser, conviene decir que puede provocar insomnio y, en algunos casos, un irrefrenable deseo de quemar algunas iglesias; tampoco muchas, dos o tres: las más feas.

Por lo demás, decir que me pareció una película muy bella y muy sólida, con una caligrafía limpia y serena, meditada, que confirma a su director como una de las voces más personales del cine de aquí.


(Una nota al margen: la niña es muy guapa y lo hace bastante bien. Pero cuando le den el próximo premio... por favor, que no la disfracen de Shirley Temple...)

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Impacta.

Porque hay un gran trabajo detrás.

Y buen gusto, aunque digan lo contrario.

fcnaranjo dijo...

Ajá, sí. Bien visto.

Anónimo dijo...

Ahí le has dado.

Yo no soy ningún experto en moda y protocolo, pero la belleza es lo que es. E imagino que les debió de costar dios y ayuda vestir, peinar y maquillar a una niña tan guapa para que pareciera eso... Fea.

A mí la película me encantó. Destila riesgo y personalidad, cosa que no abunda mucho en nuestro cine hoy en día.