miércoles, 16 de abril de 2008

capa y espada... casi



He leído de un tirón La revolución de los pinceles, una propuesta refrescante que recoge las buenas maneras de eso que algunos llaman nouvelle BD (o así) y las utilizan para armar una curiosa ucronía en la que lo que importa más es el vigor de la narración y el buen pulso para definir personajes. Lo he leído del tirón y con una permanente sonrisa en los labios al comprobar, además, que un grafismo en apariencia confuso se demuestra eficaz y hasta evocador, con un punto de Blain y otro poquito del Max de los primeros 80 en la trastienda. En muy pocas páginas, a uno le cuesta trabajo imaginar el libro sin las imágenes de Pere Mejan.

No hay mucho más que se deba decir, creo. La edición de Dolmen es ajustada, con su tapa dura y un papel mate que le va como anillo al dedo. Uno echa de menos libros como este: de los de leer de un tirón y que dejen hambre de más. (Porque habrá más, ¿verdad, señores Busquet y Mejan?)

2 comentarios:

Anónimo dijo...

gran comic
si ,señor

hecho con gusto y q derrocha amor a este pequeño gran arte que son los tebeos.
jali

FHNavarro dijo...

Sí señor gran tebeo, muy entretenido y que deja con ganas de más.

Un saludo