En la peluquería, hoy, alguien lo decía. Sentado frente al espejo, envuelto en el babero oscuro y entre el chasquido rítmico de las tijeras. Con la inevitable banda sonora de Telemadrid y entre bromas de fútbol. Demasiadas malas noticias. No puede ser que cada vez que se pone la televisión todo sean crímenes y hambre y catástrofes y accidentes y fuegos y niños muertos. Hay que poner un límite. Antes (y estoy resumiendo el discurso) había un periódico, El Caso, que era el único que contaba las malas noticias, pero elegía un número determinado, tres, cinco, ocho, y eso contaba. No es que no hubiera más calamidades, es que sólo se contaban unas pocas para no agobiar, hombre, que esto es ya un sinvivir. Que uno no quiere que le cuenten todo lo malo que pasa, y menos a las horas de comer o de cenar: se cuentan tres crímenes y a otra cosa. Que uno no quiere saber lo que pasa, hombre; ya sabemos que todo va mal, pero tampoco hay que restregarlo.
O algo así.
Ni que decir tiene que con Franco se vivía mejor.
7 comentarios:
Mi churri [:-D] se empeña en amenizarme los almuerzos con el debate de Cuatro, que es vomitivo... y he llegado al cole como partadora de horribles noticias que aún me ponen la piel de gallina: qué horror!
Besitos
P.d. Yo, sólo recuerdo de hacer caligrafías de "Amiguitos" en las que copiaba una y otra vez Franco es el salvador o algo parecido...
a mí me soltaron, hará diez años, aquello del rebaño y del pastor (y no era nadie conocido... cómo envalentona el "fachismo").
País...
Pues ideologías aparte y aunque eso de poner tope a las malas noticias es una tontería, lo que sí es verdad es la sensación de que no hay noticia buena. Seguro que si los periodistas se empeñasen con igual ahinco, se podrían llenar informativos enteros con buenas noticias. Cosa que sólo ocurre en los deportes, que debe ser el único lugar donde lo positivo es más atractivo que lo negativo. Y no siempre.
Se nota,amiga Annie,
que usted no es del Atlético de Madrid
Luis dee Luis
Se nota,amiga Annie,
que usted no es del Atlético de Madrid
Luis dee Luis
Ja, ja.
Pues tengo que reconocer que se me pasó por la cabeza eso mientras escribía, pero quería generalizar. Claro que yo disfrutaba más viendo a Perico Delgado terminar la etapa reina del Tour con un solo brazo que a Indurain aplastando rivales.
Mis genes igual sí son del Atleti...
Tiene usted razón, caballero...
:))
Publicar un comentario