El día ha sido frío a rabiar: cero marcaba el termómetro cuando llegaba a Atocha, a eso de la una y pico, y me entretenía en fotografiar el ganduleo nevado de los gatos del Botánico. La tarde, lenta y un poco rara, con poca actividad. Mi garganta, regular: me temo que la nevada de ayer va a tener consecuencias. En fin, confiemos en que no pase de un aviso la cosa...
¿Mañana? Más: de sol a sol. No importa: la semana promete ser ligera también.
Buenas noches.
¿Mañana? Más: de sol a sol. No importa: la semana promete ser ligera también.
Buenas noches.
No hay comentarios:
Publicar un comentario