Así, a ojo, esto debe ser de lo más grotesco y escandaloso que se ha podido leer en los periódicos estos días (hablo de las secciones de noticias normales, no de los corrales del corazón y aledaños). Diría que da que pensar... pero no hay nada en la noticia que, seamos honrados, sorprenda a nadie. ¿O no? Lo dice bien la compañera: ¿con tanta ingeniería de bolillos para salvar la situación... no habría que contemplar unos buenos palos a los responsables?
(Y estos, mientras tanto... a lo suyo.)
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