miércoles, 23 de noviembre de 2005

noches

De cristal o de algodón, de seda húmeda, de bizcocho tierno.

Noches de luna llena y cielo limpio, de gatos y cigarrillos, de portales oscuros, de palabras en avalancha.



Noches de lluvia tibia y una mano, dos manos en el bolsillo del abrigo, dedos enlazados, farolas manchadas de amarillo pálido.

Noches de niebla y taxi, de mirar por la ventanilla, de llaves perdidas, de ahora qué.

Y mirar mientras ella se aleja.

Y sentir el punzante recuerdo de sus dientes en los labios, el sabor de su boca.