Pues sí, resulta que anoche no pude dejarles aquí el texto con noticias que les improvisé. Problemas blogger. (Aún más, esta mañana tampoco he podido hacer nada...)
Para mi sorpresa, el post que no pude subir lo he recuperado hace escasos minutos. Doble (o triple, con lo de Auladell de aquí abajo) actualización, pues. Gran noche. (Noche, sí: es viernes aún, no se dejen engañar por las apariencias...)
Les contaba ayer de dos libros. Uno ya está comentado (pero no leído: hojeado). El otro, el de la Tusquets, lo he estado curioseando un buen rato... y me apetece mucho ponerme con él.
Les contaba, también, de presentaciones varias... Imagino que habrán ido bien todas...
¿Algo más que decir? Bueno, podría añadir que las cosas se van animando, si me permiten el eufemismo, en el trabajo. La calma precede a la tempestad, y la que se avecina promete ser de las que no pasan desapercibidas. Y larga, además.
O podría comentar que el frío amaga con su regreso por aquí... (Que hace fresco, vamos; y más que va a hacer, parece.)
Pero la cosa podría resumirse, en fin, con un discreto recordatorio: tengo sueño. A ver si acaso mañana...