Puf...
Vaya día, ¿verdad? Nublado y asfixiante. Qué horror.
Esta mañana no ha habido manera de conectar: cosas de wanadoo, imagino... Me pasa a veces. Es irritante, pero poco frecuente... por fortuna.
He estado un buen rato al teléfono, entre una cosas y otras. (Sí, charlando con mi amiga M y, por otro lado, resolviendo alguna cosita del trabajo: no, parece que este año no habrá curso de japonés; un asco... y a ver si un día de estos localizo a alguien que me traduzca la nómina...)
He comprado helado. Por fin he descubierto un sitio, al lado mismo de casa, donde los venden ricos, de los que me gustan... (¡De dulce de leche, además...!)
Luego, de tertulia. Complicado tema: con bares y restaurantes habituales cerrados, estamos un poco huérfanos... Tertulia relajada, hoy. (Ah, pero he visto que han editado ya un pack con El Prisionero en DVD... Otra joya...)
Y, en casa, más panteras rosas y un episodio de Urgencias...
Pero no se va el calor. No hay manera de que se vaya...